¿Las bacterias son aliens…?

En Science me tropecé con un artículo en que Investigadores de las universidades de Harvard y Cambridge han descubierto en un lago subterráneo bajo un glaciar en la Antártida (El lago está situado en el Valle Seco de McMurdo, al este de la Antártida) un ecosistema donde viven bacterias pese a no haber oxígeno, en completa oscuridad, a 10ºC bajo cero, en agua cuatro veces con mayor salinidad que la del mar, Consideran que este hábitat funciona como un perfecto mecanismo biológico desde hace nada menos que entre unos 1,5 y cuatro millones de años.

Expusieron: “Y esos microbios que vivían entonces han seguido reproduciéndose y es el hogar de esos seres que han vivido ahí durante millones de años, aportando un ejemplo asombroso de cómo un sistema microbiano puede sobrevivir durante un periodo prolongado sin fotosíntesis o nutrientes de una fuente externa.”


Según Jill A. Micucki y su equipo de investigación: “el agua que contiene es anóxica, extremadamente salina y repleta de hierro.
También contiene sulfato, una fuente de energía común para microbios, pero curiosamente poco del sulfuro que generalmente se esperaría si los microbios estuvieran metabolizando el sulfato mediante su reducción a sulfuro. Basándose en los isótopos de oxígeno en el sulfato y la evidencia de una enzima llamada adenosina 5 fosfosulfatoreductasa.
Y concluye en que “los microbios están de hecho reduciendo el sulfato pero que lo están haciendo a través de un metabolismo hierro-sulfuro interconectado, el cual utiliza hierro de la base de sustrato rocoso del lago.”


Ellos se plantean: “Yendo mucho más allá, este ecosistema aislado durante millones de años podría explicar la existencia de vida en otros planetas de nuestro sistema solar. Formas primitivas de vida como es el caso y es lo que vienen buscando desde hace décadas los científicos de la NASA en Marte, y en la luna Europa de Júpiter. ”


Me he quedado meditando sobre este artículo y no entiendo la resistencia de los científicos a aceptar que la vida está en todo el universo, que no tiene clasificaciones partiendo del ser humano como un eje superior ni mucho menos, sino como otra forma de vida más dentro del universo. Visible o invisible a nuestros sentidos, hecho que no ratifica de ninguna manera que lo que nosotros no “vemos” no existe.